Egipto se desvincula de la asociación para la elección de las nuevas Siete Maravillas del Mundo, según la prensa. No quiere participar en un concurso puramente comercial y carente de valor científico y no permite que las Pirámides de Giza, única Maravilla de la antigüedad que se mantiene en pie, participen en una votación enfocada únicamente en el interés comercial que este movimiento lleva consigo.
Por mi parte ya manifesté con anterioridad en este blog mi postura, a pesar de reconocer que había participado en la votación.
Posteriormente a la redacción de esta noticia me he enterado que la Alhambra de Granada, en el último comunicado de la organización, no está ni siquiera entre las diez primeras.
Pepe Fernández
MONTELLANO
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